Como piedra protectora por excelencia, la Turmalina negra tiene como especial propiedad alejar las malas energías y las malas intenciones de la gente. Con ello, la Turmalina negra pretende mantener alejada de nuestras vidas la ansiedad, la ira, y el mal humor gracias a la conversión de las auras negativas en positivas.
San Benito es el protector de los hogares y de los niños. Su medalla es un sacramental, una de las más antiguas de la cristiandad, y quienes la portan creen que tiene poder contra el mal.