¿Qué es la orgonita?
Ahora que ya está claro que no es un mineral, te explicaremos lo que es. Pero antes, debes conocer el concepto de «orgón». Según el psicoanalista, psiquiatra, médico e inventor Wilhelm Reich, es una fuerza universal, un poder esotérico que reside en el universo y que, gracias a la orgonita, se puede concentrar. De hecho, la orgonita suele tener forma de pirámide, pero también se pueden hacer esferas, obeliscos e, incluso, péndulos y joyas.
Así pues, la orgonita está compuesta de varios materiales, algunos petroquímicos como la resina (puede ser resina epoxi) y otros inorgánicos, como las virutas de metal (suele ser aluminio). De igual manera, debe contener cuarzo u otro mineral. Todos estos materiales, al comprimirse en un mismo objeto, atraen y repelen las energías contantemente y esto crea un equilibro de los campos electromagnéticos muy beneficioso para generar armonía.
Orgonita: sus propiedades
Como has podido leer antes, la orgonita destaca por sus propiedades de atraer y acumular el orgón. Así pues, gracias a ello, transforma una energía dañina, como lo es la electromagnética, en una positiva y trae armonía a la estancia. Si la llevas como joya, esta armonía te acompañará a todas partes. Igualmente, se le atribuyen propiedades curativas y beneficiosas para la salud. Esto se debe a que protege al cuerpo de los efectos de los campos electromagnéticos. En consecuencia, se mejora el sistema inmune y la concentración. El uso de la orgonita y sus propiedades, en este caso, es especialmente bueno par las personas que trabajan constantemente con un ordenador.
Orgonita: sus beneficios
La orgonita ofrece varios beneficios a las personas que las usa, ya sea como decoración en una estancia o como joya. De todos los beneficios que proporciona, destacamos los siguientes:
• Protege contra las malas vibraciones y efectos negativos de los campos electromagnéticos.
• Mejora el sistema inmune y la resistencia frente a las enfermedades.
• Incrementa la capacidad de alcanzar un sueño profundo y reparador.
• Al mejorar la energía de la estancia, también hace que las plantas crezcan más sanas y fuertes.
• Ayuda a aliviar la tensión y el estrés del día a día.
• Ayuda a mejorar la concentración y entrar en estados de meditación más profundos.
• Equilibra los estados de ánimo.